Dr. Atl José Gerardo Murillo
Fue el hijo mayor del
matrimonio formado por el farmacéutico Eutiquio Murillo y su esposa Rosa
Cornado. Nació en el barrio de san Juan de Dios en Guadalajara, Jalisco. Los
distintos intereses que asumió en su vida dificultaron la aprehensión de este artista, a
esto, se sumaron las diversas tendencias y posiciones artísticas, políticas,
filosóficas y literarias. Hay quienes resaltan ciertos paralelismos entre su
personalidad y la de José Vasconcelos: ambos activistas revolucionarios
rechazaron el régimen porfirista, se involucraron de forma importante en la
reconstrucción del estado mexicano postrevolucionario e influenciaron en la
revaloración de la cultura popular. Con ello fortalecieron el nacionalismo: sin
embargo, esta participación sociocultural desemboca con el paso de los años en
conductas totalitaristas e intransigentes. Tomó sus primeras lecciones
de pintura a la edad de 19 años en el taller de Felipe Castro en su
ciudad natal. En 1895 se muda a la ciudad de Aguascalientes, donde continuó sus estudios de
preparatoria en el Instituto Científico y Literario del Estado. Posteriormente,
regresó a Guadalajara y frecuentó el taller de Félix Bernardelli. Viajó a la
Ciudad de México para estudiar en la Academia de San Carlos o, entonces,
Escuela Nacional de Bellas Artes. En 1897 (con 22 años) obtuvo una beca de mil
pesos otorgada por el gobierno de Porfirio Díaz para ir a estudiar a Europa. El
gobierno de Jalisco también lo apoyó económicamente.
Estuvo en Inglaterra,
Alemania, Francia, España e Italia. Estudió filosofía en la Universidad de Roma
y derecho penal en la Sorbona de París. Sus actividades en Europa incluyeron el
periodismo y la pintura. En París se impregnó del arte pictórico antiguo, sobre
todo de la pintura mural renacentista. En la exposición anual del Salón de
París en 1900, obtuvo una medalla de plata por la exposición de su autorretrato
al pastel. Asistió también a la cátedra de sociología de Émile Durkheim y a la
de psicología y teoría del arte con Henri Bergson. Cuando se le terminó el dinero
de la beca regresó a México. La Academia de San Carlos lo contrató para que
realizara trabajos de clasificación, evaluación y restauración de las
diferentes colecciones adquiridas. Estableció su estudio en la misma academia y
asistió a los talleres de pintura y dibujo impartidos por la noche. Ahí fue
donde arremetió contra los métodos de enseñanza de las artes. "El
agitador", como llamaban al Dr. Atl en San Carlos, persuadía tanto a sus
colegas como a los pintores más jóvenes a que visualizaran la importancia del
arte popular. Entre ellos estaba José Clemente Orozco e Ignacio M. Beteta.
En 1910, al celebrarse
el Centenario de la Independencia de México, Gerardo Murillo encabezó la famosa
protesta ante la Secretaría de Instrucción Pública y Bellas Artes, por la
exposición de los pintores españoles Ignacio Zuloaga y Sorolla. Como resultado
de esa protesta logró obtener tres mil pesos del gobierno, con lo que los
inconformes organizaron una exposición colectiva de gran éxito. El movimiento
armado de 1910 frenó los proyectos de Murillo y aún sin un plan definido,
emprendió su segundo viaje a Europa en 1911. Se estableció en Francia, donde
realizó exposiciones, tanto en Alemania como en Italia. En París fundó el
periódico Action d´ Art y la Liga Internacional de Escritores y Artistas. Su
propósito fundamental era reunir escritores y artistas en una coalición de
combate para transformarlos en lo que según él debían ser: factores
primordiales de progreso. Al enterarse del golpe de estado que dio Victoriano
Huerta en 1913, decidió regresar a México, donde se reunió con Venustiano
Carranza. Por encomienda de este, el Dr. Atl se entrevistó el 28 de julio de
1914 con Emiliano Zapata para pedirle que se uniera a Carranza con el fin de
derrotar a Huerta. Zapata aceptó la propuesta.
En agosto de ese año,
Gerardo Murillo fue nombrado interventor de la Escuela Nacional de Bellas Artes
o de San Carlos, luego quedó al frente de la institución, lo cual le permitió
realizar cuanta reforma creyó necesaria en los programas de estudio. Su
participación en la política de esos turbulentos años continuó hasta que tras
el asesinato de Carranza en mayo de 1920, se vio relegado de ese campo. A
partir de ese momento se dedicaría a la publicación de libros. Los ilustró con
retratos, desnudos de mujeres, montañas, mares, volcanes y comentarios. En 1921
publicó Las artes populares en México y en 1924, Iglesias de México y la
revista de la Liga de Escritores de América, de la cual fue presidente en 1926.
Cuando se inició la
guerra cristera en 1926, el Doctor Atl simpatizó con el movimiento
anticlerical. A partir de 1927 publicó artículos en El Universal y en el
Excélsior. Su obra alcanzó estabilidad a partir de la década de los treinta,
cuando se dedicó a la producción de retratos y paisajes. Entre sus obras más
importantes destacan los retratos de la pintora, poetisa y modelo mexicana
Carmen Mondragón, con quien sostuvo un sonado romance y a quien él mismo
bautizó en 1921 como Nahui Ollin. Tras la amputación de su pierna derecha, el
Doctor Atl se vio impedido de seguir escalando volcanes y montañas, actividad
que realizó desde 1909. Se dedicó entonces a sobrevolar los cielos, lo que le
permitió alcanzar una visión más amplia de los paisajes, creando así el
"aeropaisaje". Otra de sus creaciones fueron los
"atl-colors", una pasta dura compuesta de cera, resina y petróleo con
los que se podía pintar papel, tela o roca.
Atl
y los volcanes
El pintor-vulcanólogo se
adentró en el mundo de la ciencia como consecuencia de su atracción por la
belleza. El primer trabajo que realizó sobre el Popocatépetl fue literario (Las
sinfonías del Popocatépetl). También hizo dibujos, esquemas y pinturas del
volcán. Sus estudios posteriores incluyen El origen del Pedregal de San Ángel y
La zona aurífera del Centro Colorado en Oaxaca. Pero no solo plasmó volcanes
mexicanos en sus obras. Realizó investigaciones sobre volcanes italianos;
dibujó el Etna y el Stromboli. Tuvo la oportunidad de recibir enseñanzas de los
especialistas de la época: De Fiore, Pert y Friedlander, con este último
realizó estudios sobre los volcanes mexicanos, los publicaron en la Rivista
vulcanologica di Napoli.
Su afición por los
volcanes lo llevó a escalar frecuentemente el Popocatépetl, el Iztaccíhuatl y a
presenciar el nacimiento del Paricutín el 20 de febrero de 1943, en el llano de
Quitzoco, cercano al pueblo llamado Parangaricutiro en Michoacán. Abandonó
todas sus actividades artísticas en la Ciudad de México para mudarse por largas
temporadas a las faldas del nuevo volcán. Esto con la finalidad de estudiarlo y
capturar la belleza del nuevo paisaje. Registró este fenómeno en apuntes y
pinturas; gracias a estos datos, escribió el libro Cómo nace y crece un volcán:
el Paricutín, 1943, editado en México en 1950. Esta obra se compone de dos partes:
la primera contiene observaciones cotidianas hechas desde su cabaña, muy cerca
del volcán. Observó desde ahí las corrientes lávicas y las arenas; la segunda
parte abarca un estudio técnico dedicado a hipótesis en las que señala la
mecánica interna que produjo las explosiones y el derrame de lava. En palabras
de Murillo: se trata de "Un diario ilustrado del Paricutín adicionado de
algunas hipótesis derivadas de los hechos observados."
Estudios
Comenzó a estudiar
pintura en la ciudad de Guadalajara. A la edad de 21 años, Murillo entró en la
Escuela Nacional de Bellas Artes en la Ciudad de México para completar sus
estudios. Tiempo después, Murillo obtuvo una beca otorgada a alumnos destacados
por la Academia de San Carlos, para continuar sus estudios en Europa. Su área
de aprendizaje se amplió con el paso del tiempo. Estudió filosofía y leyes en
la Universidad de Roma. Murillo también viajó a París en repetidas ocasiones
para asistir a pláticas sobre pintura y dibujo impartidas por Henri Bergson.
Sus fuertes intereses políticos lo hicieron colaborar con el partido socialista
de Italia y trabajó algún tiempo en el periódico Avanti!. En 1915, al servicio
de Venustiano Carranza, se prestó para intermediar con la Casa del Obrero
Mundial para integrarlos a las fuerzas del constitucionalismo. El cual estaba
en contra de las tropas de la División del Norte de Francisco Villa, y del
Ejército Libertador del Sur de Emiliano Zapata.
En consulta con los
sindicatos miembros de la Casa del Obrero y ante el rechazo de todos ellos a la
firma de un pacto con Carranza, convenció a 67 miembros de la misma para viajar
a Veracruz. Logró que estos 67 militantes firmaran un pacto del cual se
derivaron los Batallones Rojos bajo la promesa de otorgarles armas para que
ellos realizaran su revolución social. Estaban formados por desempleados que
fueron reclutados en la ciudad de México, con la promesa de casa y sustento a
sus familias en Orizaba, Veracruz. Este hecho determinó la formación del
movimiento obrero mexicano en su vertiente corporativa, con la conformación
después de la Confederación Regional Obrera Mexicana de Napoleón Morones. Los
firmantes del Pacto que descubrieron el engaño de Carranza (dio sentencia de
muerte a huelguistas de la propia COM en 1916) formaron una nueva central
combativa. Era independiente del estado. En los centros de trabajo, la
Confederación General de Trabajadores se mantuvo autónoma hasta 1931, cuando no
supo enfrentar las consecuencias de la primera Ley Federal del Trabajo. La cual
tenía tintes fascistas, copiada del Código del Trabajo de Benito Mussolini.
Años después, el Dr. Atl
se manifestó abiertamente a favor del bando nazi y decididamente antisemita,
declarando su admiración por Adolf Hitler.
Así
vio con optimismo los primeros compases de la Segunda Guerra Mundial. Las
victorias hitlerianas le hicieron sentir próximo el fin del marxismo y del
comunismo, del semitismo y del imperialismo. Tales postulados le llevaron a
colaborar con la revista Timón dirigida por José Vasconcelos.
Probablemente financiada por la embajada alemana. Ésta fue prohibida por el
gobierno mexicano a causa de sus inclinaciones nazis.
Influencia
renacentista
En México vino primero
la agitación artística y después la revolución social- Dr.Atl. Fundador del
renacimiento artístico mexicano. Decepcionado por el culto porfirista que lo
censuraba, que prefería a los copistas europeos y de los pintores
revolucionarios que no lo tomaban en serio. Decidió volver a Europa y dedicarse
a la pintura de caballete. Con ella obtuvo grandes éxitos en los salones de
París, críticas positivas en Comaedia, Gil Blas y Le Monde Illustré. Tuvo
entonces espacio a la venta de sus obras, las que le proporcionarían estimables
sumas de dinero.
Participación
en la Revolución
Atl solía invertir el
dinero obtenido de la venta de sus obras, en proyectos fantásticos. Uno de
ellos se le ocurrió en París: quería construir una ciudad para los
privilegiados del talento. Así que comenzó a publicar una revista llamada
Action d´Art. Su idea era crear cerca de París, una ciudad ultramoderna que
albergara y mantuviera a los personajes más selectos de la civilización
contemporánea. Mientras esto ocurría en París, en México estalló un conflicto
militar que culminó con el asesinato del presidente revolucionario Francisco I.
Madero y del vicepresidente José María Pino Suárez, por orden del general
Victoriano Huerta. Al enterarse, abandona su proyecto de ciudad intelectual
parisina y decide enfocarse a luchar por su país.
Durante varios meses
publicó un periódico titulado La Révolution au Mexique. Realizó gestiones en
favor de la facción revolucionaria. Tuvo pláticas con el ministro de finanzas
Dumont y con El Tigre, Georges Clemenceau. Logró impedir el empréstito de 130
millones de francos que el gobierno del general Huerta había promovido en la
capital de Francia, el cual emezaron a suscribir los bancos y el público.
Murillo fue secundado por el Ministro de México en Francia, Miguel Díaz
Lombardo. Después de estas gestiones, se
dirige a México.
Es amenazado en un barco de carga. Viajó con un nombre y título falso: Giorgio
Stello, capitán aviador de la Real Fuerza Aérea Italiana; sin embargo, la
Comandancia Militar de Coatzacoalcos tuvo conocimiento de su presencia e
intentó arrestarlo. Gracias a la intervención del capitán los soldados se
retiraron y el pintor logró desembarcar, pues demostró completamente que Atl
era el capitán Stello.
Maestro
y expositor
Como maestro de la
Academia de San Carlos (1910), el Dr. Atl alentaba a los jóvenes estudiantes,
como José Clemente Orozco, David Alfaro Siqueiros y Julián Márquez a romper con
las pautas tradicionales y aventurarse a crear con mayor audacia y libertad. Ese
año, bajo la dictadura de Porfirio Díaz, se presentó una exposición de pintura
española para celebrar el centenario de la independencia. En respuesta, el Dr.
Atl organizó otra exposición con artistas mexicanos. El Dr. Atl volvió a México
entre 1913 y 1914. Se unió al movimiento revolucionario, específicamente con el
bando de Venustiano Carranza. Más tarde se alió con Álvaro Obregón. El Dr. Atl
comparó en cierta forma a la revolución mexicana con el socialismo bíblico, a
fin de promover el crecimiento del arte, la literatura y la ciencia; terminó su
actividad política apoyando abiertamente a Hitler, antes y durante la Segunda
Guerra Mundial. Pintó un sinfín de obra en el Hotel Casino de la Selva, en
Cuernavaca, Morelos, en donde vivió por muchos años apoyado por Manuel Suárez y
Suárez.
Paisajista
y escritor
Una de sus múltiples
aficiones era el estudio de los volcanes. Como paisajista, dedicó una cantidad
importante de su obra a la representación de los volcanes Popocatépetl e
Iztaccíhuatl desde diversas locaciones de la Ciudad de México, fácilmente
visibles por aquella época. Se le atribuye el diseño del telón de cristal
opalesence elaborado por la casa Tiffany de Nueva York, para el escenario de la
sala de conciertos del Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México,
inaugurado en 1934. Incluso él aseguró tal hecho, pero no ha sido comprobado.
También escribió el
libro Cómo nace y crece un volcán. El Paricutín. Cuenta sus experiencias al
presenciar la erupción del volcán en el estado de Michoacán. Lo ilustró con
pinturas y dibujos de su autoría, en 1943. El Dr. Atl fue un pintor paisajista
que se puede considerar heredero y sucesor de José María Velasco, quien fue su
maestro. A sus últimas series pictóricas las llamó "aeropaisaje", ya
que sus registros fueron hechos desde un helicóptero. Tuvo una relación
romántica muy intensa con Carmen Mondragón o Nahui Ollin, pseudónimo con el que
él mismo la bautizó. El Dr. Atl siempre se responsabilizó de ella y la ayudó
mediante el pago de una pensión. Pasajes de esta relación tormentosa son
narrados por él
mismo en su autobiografía:
Gentes profanas en el convento publicada en 1950.
Se le reconoce también
la creación de pinturas especiales con las que solía trabajar, llamadas Atl
Colours, una serie de pasteles grasos. Es curioso que algunas falsificaciones
de la obra del Dr. Atl, a pesar de ser hechas con Atl Colours, se hagan sobre
masonites y los fechen para mediados de los años veinte, cuando aún no existía
este material. El Dr. Atl llegó a pintar sobre celotex.
Su obra literaria incluye, entre otros títulos, tres volúmenes de cuentos:
Cuentos de todos colores. También libros y artículos sobre temas
nacionales, de diverso orden.
José Luis Martínez lo
propuso como miembro del Colegio Nacional. Él aceptó y se integró el 6 de
noviembre de 1950; sin embargo, renunció al nombramiento el 5 de julio de 1951.
Sacrificó esta distinción para recuperar su libertad de acción, ya que de
alguna manera sentía que la seriedad y prestigio de esta institución disminuirían
su espíritu revolucionario y sería ubicado en un lugar solemne y riguroso. El
Senado de la República
lo condecoró
en 1956 con la Medalla Belisario Domínguez.
Por su desempeño
en Bellas Artes, ganó
el Premio Nacional de Bellas Artes en 1958. Murió en la Ciudad de México el 15 de agosto de
1964 todavía
en plena actividad artística,
a pesar de haber perdido una pierna, como consecuencia de un accidente sufrido
en una de sus expediciones al Paricutín. Sus restos están depositados en la
Rotonda de los Hombres Ilustres del Panteón Civil de Dolores en México.
Fuente:
https://es.wikipedia.org/wiki/Dr._Atl
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